Reconocida como la mayor ciudad de Europa, Berlín es una urbe rica por la historia que la rodea. Y es que grandes acontecimientos han ocurrido en la capital alemana, tales como ser la sede de la dinastía Hohenzollern en los siglos XIX y XX y el punto central del nazismo.
Estos atractivos y otros hacen que miles de turistas recorran sus calles diariamente. Con más de tres millones de habitantes, Berlín supera en tamaño a París y Londres. Esta característica debe tomarse en cuenta si se viaja hacia ese destino. En este artículo te ofrecemos varios consejos para disfrutar de Berlín.
Transporte
Al ser Berlín una ciudad de grandes dimensiones resulta difícil trasladarse sin un medio de transporte. Es posible caminar pero sería demasiado para poder llegar a los distintos sitios de interés. Existen varias opciones para moverse usando el transporte público: autobuses, metro y tranvías, estos últimos solo localizables en las zonas más viejas de la urbe.
Para ahorran en materia de transporte, se aconseja comprar el llamado “Berlín — Potsdam WelcomeCard”, un bono con validez en Berlín y las geografías aledañas que permite desplazarse en cualquier medio de transporte con billetes más baratos. Además, la reducción de los precios se hace extensiva a algunos museos y centros culturales, como por ejemplo, los museos.
En Berlín también es una opción andar en bicicleta. Así que si te gusta pasear en bici no pierdas la oportunidad de hacerlo porque además de ser barato, 12 euros diarios, te brinda la posibilidad de hacer deporte y no pasar por alto ninguna de las maravillas que depara esa ciudad histórica.
Mejores días para conocer
Seguro deseas aprovechar al máximo tu estancia en Berlín. Por eso, cada día cuenta y es preciso visitar la mayor cantidad de lugares posibles. En la capital alemana el lunes se recesa en la mayoría de los centros e instituciones culturales. De tal forma, el martes y el miércoles son los mejores días para conocer, sobre todo porque los lugares permanecen abiertos hasta avanzada la noche.
Hábitos importantes
Existen algunas actitudes que deben acompañarte siempre. Y es que es casi obligatorio llamar a los habitantes de Berlín por su nombre o aquel cargo que los distingue. Como es poco probable que domines cada nombre, excepto el de tus amigos, puedes auxiliarte de la expresión “Herr- Doctor” porque es adaptable, en Alemania, para no pocas profesiones.
Por otro lado, nunca entres a un establecimiento gastronómico sin saludar a los presentes; es de mala educación. No se trata de ir a la mesa para ser atento con cada comensal sino de decir: Mahlzeit o sea provecho justo al entrar.
Documentos seguros
Para un turista, sea el país que visite, es determinante mantener seguros documentos importantes como el pasaporte. Y es que ellos son tu identificación y los encargados de certificar tu existencia. Cuando pasees por la ciudad lleva siempre contigo una copia de esos documentos. Si los portas te evitaras algunas molestias. Por otro lado, es mejor dejar bien guardados los originales para que no se pierdan o sean robados. Además es muy sabio poseer varias copias de seguridad.
Dinero
Antes de viajar a cualquier país debes estar al tanto del uso que el dinero tiene allí. Para viajar a Berlín no es necesario andar con mucho dinero encima pues se puede pagar con tarjeta de crédito o extraer dinero, en los cajeros, en casi cualquier parte de la ciudad. No obstante, siempre se debe tener dinero efectivo para enfrentar cualquier imprevisto, pagar un taxi o comer algún alimento.
Acceso a Internet
En esta ciudad casi todas las cafeterías y lugares para el público poseen internet gratis. Así que podrás conectarte en casi cualquier momento que lo desees.